Jan Mandyn, Harlem; Flandes. Festín Burlesco. Óleo sobre madera de roble. Museo de Bilbao. C 1550
Quienes integramos El Convite, Club Gourmet, grupo gastronómico fundado en diciembre de 2003, les damos la más cordial bienvenida a nuestra página, en la que registramos nuestras actividades gastronómicas, orientadas siempre al disfrute de la buena comida, la recreación de algunas tradiciones culinarias y la convivencia de sus asociados

26 de mayo de 2008

El Pato Olímpico


En la guía turística de China escrita por Kuan Yu-Chien y Petra Häring-Kuan se cuenta que después de la caída de la dinastía Qing y la fundación de la nueva república popular, los cocineros de la cocina imperial del palacio, al quedarse sin trabajo, tuvieron que emplearse en diversos restaurantes de la ciudad y que cuando se abrió al público el parque Beihai, un eunuco de palacio, junto con algunos ex cocineros imperiales, fundaron en este lugar un restaurante que ofrecía a cualquiera persona, los platillos que en otra época estaban sólo reservados para el paladar del Emperador chino y su corte. Entre las recetas que formaban parte de tan exclusivo menú, figuraba el legendario pato lacado, preparado al estilo pekinés. Este platillo, famoso ya en todo el mundo por su aroma y sabor delicado, ahora se prepara en miles de restaurantes dispersos por los cinco continentes, pero en nuestra ciudad, usted sólo lo podrá encontrar en la Casa del Pato Gon Pen, en donde su diligente propietario y chef principal, miembro distinguido de El Convite, agasajó el pasado fin de semana al grupo entero, por segunda ocasión, con una cena en la que este animalito era el platillo central.
Se cree que en su reciente viaje a China, Fernando y Mariza se asesoraron con algunos descendientes de esos cocineros imperiales, a los que encontraron viviendo en un hutong de Pekín, para diseñar y ofrecer así a los conviteros un exquisito menú de especialidades del norte y centro de China en el que se incluían semillas de girasol y tomates dulces como botana, sopa agripicante, brócoli frío con frijoles negros al ajonjolí, pepinos salteados con especias picantes y col agridulce como contornos, y como la especialidad estrella del menú, el pato lacado, seguido después por unas peras al vapor y fruta fresca como postre.
La estupenda cena estuvo precedida por una bienvenida en formato mp3, que gracias a la red mundial, Fernando II envío a El Convite desde la capital Imperial. Enmarcada por una mesa muy bien puesta, un menú bilingüe (o al menos eso creíamos) y un licorcito de sorgo de nombre beijiu de 42° grados de alcohol, esta convivencia se prolongó hasta altas horas de la noche. Todos los que formamos parte de este club, felicitamos calurosamente a los anfitriones por la riquísima cena y la sincera hospitalidad con que ellos la arroparon. Y ahora lo volvemos a decir pero en chino: ¡Mucha glacias Maliza y Feldy, pol tan lico convite y tan sablosa chala!